No cabe la menor duda de que la eficiencia energética es uno de los mayores retos que tenemos que asumir. Eso es algo que hay que plantear seriamente, ya sea para un conjunto de viviendas o en las instalaciones de una empresa, pero, ¿por dónde empezar?

Una manera de hacerlo es a través de una auditoría energética. Pero, ¿en qué consiste una auditoría energética? En este artículo, te explicamos detalladamente qué es una auditoría energética, cómo se lleva a cabo, sus beneficios y mucho más. ¡Sigue leyendo para saber más!

¿Qué es una Auditoría Energética?

Se podría definir la auditoría energética como un proceso que tiene por objeto evaluar la eficiencia energética de un edificio o instalación.

Esta evaluación consiste en el análisis de los sistemas energéticos del edificio, la identificación de oportunidades para mejorar la eficiencia energética, y la presentación de un informe que contiene las recomendaciones para implementar dichas mejoras.

En definitiva, una auditoría energética es un análisis detallado de la energía utilizada en un edificio, con el fin de evitar un coste excesivo en el consumo de energía y, sobre todo, para conseguir diferentes recomendaciones de mejora.

Esto es lo que lo diferencia principalmente con la certificación energética. Una auditoría energética evalúa la eficiencia energética de un edificio y presenta recomendaciones para mejorarla, mientras que una certificación energética evalúa la eficiencia energética de un edificio y le asigna una calificación en una escala de A a G.

Independientemente de la auditoría energética y de su proceso, ya conocemos algunas cuestiones que ayudan notablemente a reducir el consumo de energía. Desde Arona Systems, somos bien conscientes de ello. Por eso, uno de nuestros servicios más demandados es el de instalar placas solares de autoconsumo, ¡consúltanos!

Beneficios de una Auditoría Energética

El simple hecho de realizar una auditoría energética lleva aparejado una serie de beneficios muy importantes. Así, la identificación de oportunidades permite establecer pautas con las que ahorrar energía y coste.

Esto implica, del mismo modo, que se reduce su impacto medioambiental y, más concretamente, la emisión de gases de efecto invernadero. Otros de los motivos para realizar una auditoría energética residen en el mayor bienestar que proporciona a aquellas personas que hacen uso del edificio. Por último, pero no menos importante, cabe recalcar que una auditoría energética puede ser imprescindible para cumplir con la normativa vigente, como en el caso de edificios de uso público.

Fases de una Auditoría Energética

El proceso de una auditoría energética varía según la empresa o profesional que la realiza. Ahora bien, suele contar con las siguientes fases para que cumpla su cometido.

1. Revisión Documental

El paso inicial consiste en la revisión de todos los documentos relacionados con el edificio, tales como facturas de energía, planos, especificaciones técnicas y cualquier otra documentación relevante.

2. Inspección Visual

Posteriormente, es necesario realizar una inspección visual del edificio, con el objetivo de identificar problemas de eficiencia energética, tales como ventanas o puertas que no cierran correctamente, fugas de aire o falta de aislamiento adecuado.

3. Medición y Registro de Datos

Se miden y registran datos de consumo energético, entre los que se incluyen la cantidad de energía que se utiliza para calentar o enfriar el edificio o la cantidad de energía que se utiliza para iluminación, entre otros.

4. Análisis de datos

Tras esto, se realiza un análisis de los datos obtenidos durante la medición y registro de datos, con el objetivo de identificar patrones y tendencias en el consumo de energía del edificio.

5. Identificación de oportunidades de mejora

Gracias a estos datos, se procede a la identificación de oportunidades de mejora en la eficiencia energética del edificio, tales como el reemplazo de bombillas o lámparas ineficientes, la instalación de aislamiento adecuado, actualización de sistemas de calefacción o instalación de sistemas de autoconsumo.

6. Presentación del informe

Por último, se presenta un informe detallado donde se especifica cada una de estas oportunidades para conseguir mejorar la eficiencia energética en el edificio.